Cayó por 0-3 con goles de Lautaro Martínez, Ángel Di María y Paulo Dybala, quedando como subcampeón de la denominada Finalíssima en la despedida de uno de sus máximos símbolos, Giorgio Chiellini. Lograrían el pase a los octavos de final como segundos de grupo, con 9 puntos. El comienzo de los rossoneri en el Calcio no fue el esperado, ya que se encontraban perdidos en mitad de la tabla tras 12 jornadas, siendo uno de los peores arranques de campeonato en décadas.